La salud es lo más importante, por lo que es esencial contar con un seguro que brinde la cobertura médica necesaria. Los costos de atención médica pueden variar significativamente dependiendo del destino. Por ejemplo, en países como Estados Unidos o Asia, las tarifas pueden ser exorbitantes, por lo que necesitarás una cobertura mucho más amplia que en Europa. Asegúrate de que tu seguro cubra emergencias médicas, traslados en ambulancia y hospitalización sin límites elevados.
No olvides la repatriación sanitaria
En situaciones de gravedad, como un accidente o fallecimiento, la repatriación sanitaria es crucial. Asegúrate de que la póliza no tenga limitaciones geográficas ni económicas y que, si es necesario, puedas ser acompañado por un familiar sin costo adicional.
Lee las condiciones de la póliza
Es esencial revisar la letra pequeña de cualquier seguro de viaje. Algunas dolencias o situaciones pueden quedar excluidas. Un buen seguro debe ofrecerte cobertura para imprevistos y garantizar que todas las condiciones estén claras antes de viajar.
Cobertura de overbooking y pérdida de equipaje
El overbooking es más común de lo que parece y puede generar gastos adicionales. Por lo tanto, es recomendable que tu seguro incluya una cobertura amplia para estos casos. Además, la pérdida o robo de equipaje es una de las incidencias más frecuentes, por lo que tu seguro debe protegerte adecuadamente ante este tipo de inconvenientes.
Asistencia 24/7
La disponibilidad de un número de contacto las 24 horas es imprescindible. Un buen seguro debe ofrecer atención al cliente en cualquier momento, especialmente si necesitas asistencia médica o resolver cualquier imprevisto mientras te encuentras en el extranjero.
Con estos puntos en mente, podrás seleccionar un seguro de viaje que se adapte a tus necesidades y te ofrezca tranquilidad durante tu aventura.